ENTRENADOR PERSONAL DEDICADO EXCLUSIVAMENTE AL SECTOR FEMENINO

La fruta está repleta de funciones esenciales.

Son alimentos reguladores y activadores de las funciones vitales, protectoras, muy ricas en vitaminas, minerales, fibra, micro nutrientes esenciales… y además, si se utilizan bien, son de utilidad inmediata para la desintoxicación y pérdida de peso ya que el cuerpo ahorra muchísima energía para poder transformarlas. 

En sí mismo, un zumo de frutas es un producto sano que puede llegar a ser muy creativo en cuanto a las mezclas y vitaminas. Pero tampoco debemos pasarnos en las combinaciones, ya que, en exceso, nada es bueno (hipervitaminosis).

Lo que quiero decir con todo esto es, que siempre será preferible comer fruta fresca, ya que obtenemos los nutrientes de la manera más correcta. Pues al comer una pieza de fruta entera, ingerimos numerosas fibras que con el agua en el estómago se hinchan y crean sensación de saciedad.

También el hecho de que la tengamos que masticar contribuye a esta sensación. 

En el caso de los zumos, como generalmente se tamiza la pulpa, no existe tanta sensación de saciedad, por lo que puede fomentar más hambre de lo normal. Tampoco debemos ingerir, por ejemplo, 10 piezas de fruta al día… ya que podemos subir el nivel de azúcar en sangre.

La mejor forma de comer fruta será de forma sólida, pero tomarla algún día en zumo no os causará ningún mal. 

Otros artículos que te puedan interesar