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- Músculos trabajados: Con este ejercicio no solo se trabaja el tríceps, también se implican músculos como el infra y supraespinoso, lo que va a suponer una mejora de la estabilidad a nivel de hombro y codo.
- Técnica de ejecución: Apoyamos una rodilla en un banco plano y la otra permanecerá semiflexionada apoyada en el suelo.
- Nos aseguraremos de que el tronco está en línea recta con la cabeza, evitando hiperextensión o hiperflexión de la zona cervical.
- Con el brazo pegado al tronco y el codo flexionado, iniciamos la extensión mientras espiramos. El movimiento será lento pero fluido, sin extensión brusca y sin llegar a extender totalmente.
- El movimiento de flexión lo realizaremos mientras inspiramos, evitando que el codo caiga de la altura del tronco.
Errores frecuentes:
- Extensión brusca del movimiento.
- Extender totalmente el brazo, bloqueando la articulación.