A día de hoy es el mejor aceite que podemos usar para cocinar, ya que mantienes todas sus propiedades al ser sometido a altas temperaturas.
Va a ser difícil desterrar la idea de que es malo consumir grasas saturadas como las contenidas en la yema de huevo o el aceite de coco, pero estudios recientes han demostrado claramente que el problema no está en el consumo de grasas saturadas naturales, sino en aquellas provenientes de alimentos procesados, transaturadas, bolleria.
El aceite de coco es blanco, muy aromático y sólido a temperatura ambiente. A partir de los 25º C se vuelve solido. La grasa saturada del aceite de coco orgánico no es parecida a ninguna otra grasa encontrada en carnes y aceites vegetales, sino que es idéntica al grupo de grasas encontradas en la leche materna humana que ayudan a mejorar la digestión, refuerzan al sistema inmune, protegen contra infecciones virales, bacterianas, y hongos.
Formado por ácidos grasos de cadena media, debido a su longitud más corta se metaboliza y se absorben de forma diferente que las grasas de cadena larga (por ejemplo aceite de oliva). Los triglicéridos de cadena media viajan directamente al hígado y se metabolizan más rápidamente, además son más solubles en agua. Debido a esto, no requieren bilis para romperse y se descomponen con mayor rapidez.
Para las personas con hipotiroidismo, el uso del aceite de coco es ideal, ya que este aceite sube la temperatura del cuerpo. Estas personas, tienen el cuerpo frío, está frío porque el hipotiroidismo hace que el metabolismo sea lento, por lo tanto hay que acelerar el metabolismo.
Propiedades del Aceite de Coco:
– Ayuda a controlar la diabetes y a regular la tiroides.
– Ayuda a bajar de peso.
– Ayuda a la digestión y la absorción de los nutrientes.
– Sus ácidos grasos de cadena media proporcionan una fuente de energía inmediata
– Resulta ideal para las personas que se le han extirpado la vesícula biliar por no necesitar enzimas pancreáticas y bilis para su digestión.
– Refuerza el sistema inmune, ya que contiene importantes nutrientes.
– Previene la osteoporosis.
– Previene infecciones bacterianas, virales, y de hongos.
– Previene las manchas y las arrugas en la piel, manteniéndola sana y tersa.
– Reduce el riesgo de cáncer y otras condiciones degenerativas, como el párkinson o Alzheimer.
Destaca en él un compuesto llamado ácido caprílico , que tiene las siguientes propiedades:
– Es fungicida y mata hongos como cándida albicans.
– Destruye ciertos virus como el herpes.
– Elimina bacterias.
– Logra que el cuerpo se desprenda de tóxicos.